domingo, 27 de junio de 2010

MOMENTOS DE CALMA



El nombre para estas reflexiones se me ocurrió mientras subía placidamente en el telesilla de los entrenamientos matutinos de la Maxiavalanche 2010. Esos momentos de paz, tu solo junto a tu bicicleta, la miras a ella, la chequeas componente por componente a la par que contemplas magníficos paisajes, escuchando el sonido de la libertad de estar inmerso en plena naturaleza. La sensación de todo esto es muy difícil transmitir pero gratamente reconfortante el recibirla, espero conozcas esto que te hablo.

Tu estas ahí, colgado de una sirga a varios metros de altura pero tu cabeza se traslada involuntariamente a las sendas, entras en trance, aparece la mirada de los 1000 metros y empiezas a recorrer con el subconsciente la bajada que tienes acordada con los colegas bajar. Pronto llegas a los puntos mas significativos del trail y piensas, aquí puedo ir mas rápido, es mi terreno, en este salto entrare mas rápido y volare mas, se que puedo hacerlo, las raíces con calma, después pedaleare mas fuerte, hemos venido a pasarlo bien, no es plan de acabar el día con ningún disgusto.

Esta es mi época favorita del año, como también supongo que será la de otras muchas personas por las vacaciones estivales, a mi eso no me importa, la playa no me gusta, hace años que no la piso. Para mi es la mejor porque desde que descubrí los Bike Parks es la forma en la que mas disfruto del invento de las dos ruedas.

Ahora continuo con el otro tipo de Mountain Bike, extraño para muchos, habiendo cumplido mis objetivos que este año han sido bastante ambiciosos, ya me metí entre pecho y espalda el Camino de Santiago y un par de semanas después la Maxiavalanche de Vallnord que se torno especialmente dura por la climatología y el barro. El cuerpo me pide relax, entrenar para estar en forma no para competir.

Por eso ahora quiero montar sin objetivo, bueno con uno solamente, el pasarlo lo mejor posible, ver mi bici calzada con las ruedas gordas me genera un bienestar interior, es hora de montar para gozarla, igual me da solo que acompañado. Ya vuelven esos sanos piques montaña abajo, las volteretas y las frenadas ”in extremis“, emocionarte y salvar la galleta por los pelos, con las otras bicicletas también se pueden percibir estas incidencias pero creo que es diferente que el centrarte en bajar, bajar y bajar.

Cada modalidad, cada estación climatológica, el lugar, si es la primera vez que montas ahí o te lo conoces como la palma de tu mano, todo influye a la hora de sumar los minipuntos de la satisfacción. Ahora solo tienes que coger tu bici e intentar ganar el concurso por goleada. Sal y monta, pero sobretodo DISFRUTA.