Son la cara y la cruz de nuestro deporte, la gente los alaba o los critica generalmente sin conocerlos. Hay riders que no ganan carreras pero que su personalidad y carisma les haga tener muchos más fans que uno que las gane de calle. Son personas al fin y al cabo.
Entrenan como nadie, tienen cogido el tranquillo a trucos difíciles, son los que más tumban y los que más lejos saltan. Ellos también empezarían en un barrio saltando bordillos y escaleras y fabricando sus saltos con tablas de los escombro y echando carreras con sus amigos en los descampados. Fueron chavales como tú.
Tenemos la suerte de compartir una afición donde nuestros profesionales no se exhiben en macro instalaciones rodeadas de medidas de seguridad, ellos están en la montaña, en los circuitos o en la carretera, te los puedes cruzar en cualquier momento, son gente que les gusta viajar y entrenar en lugares diferentes como a ti. Han conseguido hacer de su hobbie un trabajo y de su trabajo un hobbie. Disfrutan con sus amigos.
Son un reclamo publicitario para las marcas, todas quieren tener a los mejores, porque saben que dándoles dinero ellas recibirán más dinero. Generalmente no se monta por dinero aunque se negocien mucho los fichajes, se hace porque les gusta y disfruta o acaso tú estudias o trabajas a la fuerza en una cosa que no te gusta durante toda tu vida. Se ganan la vida como todo el mundo.
Yo los alabo cuando veo algunas entrevistas donde algunos iluminados con la carrera de periodismo después de algún mal incidente para el corredor les sueltan la pregunta menos apropiada en ese momento y ellos no los mandan a la mierda porque tienen mucha más clase que el que agarra el micrófono. Saben poner al mal tiempo buena cara.
Se esfuerzan en cada pedalada, nunca dan nada por perdido, tienen el poder de sacrificio más alto que cualquiera de nosotros, tienen un punto de picardía mayor que sus rivales y también que suerte tienen, disponen de lo último en material. Saben lo que cuesta la gloria.
Los debemos de cuidar mucho mas, son como una especie en extinción, son pocos y muy valiosos para nuestro ecosistema. Quizá algún día se hagan eco los telediarios nacionales de que tenemos grandes campeones en el mountain bike y que la gente se molesta en organizar pruebas mucho más importantes que algunas noticias.
Son tu objetivo, quieres ser como ellos, no está mal, por lo menos no has elegido a Torrente ni al Pim pam toma lacasitos. Ese flow, esos colores exclusivos, joder que tíos estos Pros. No son vividores como muchiiiisima gente se piensa, están ahí simplemente porque son los mejores y despuntaron en su momento. Encontraron el deporte, donde sus cualidades físicas eran idóneas. Después cada uno hace su carrera profesional como le parece o a veces como le aconsejan y ahí es donde se aloja el éxito o el fracaso.
Aporto esto para que sea una carta de respeto a la gente que trabaja en esto y que no son gente que esta distante del resto de bikers, si no que están ahí, cerca de nosotros. Puedes incluso mear junto a uno en los baños de un bike park, ahí demuestran que también son personas y que sea una inyección de moral y espíritu de sacrificio para poder ser uno de ellos. Recuerda, Sal y monta, pero sobretodo DISFRUTA.
Publicado en Wallride nº 41.
